Desde la Clínica Bartolomé Puerta sabemos la importancia del momento del embarazo para la mujer y su entorno familiar, por ello, hace varios años que contamos con un departamento dedicado a esta etapa de vida que la mayoría de mujeres y familiar comparten alguna vez.
En primer lugar debemos conocer los cambios físicos, emocionales y psicológicos que se producen en un embarazo tanto antes del parto como después de éste. De esta manera y conociendo los acontecimientos podemos prevenir de forma más eficaz sus complicaciones y dar respuesta a todas las dudas.
Fisiológicamente el cuerpo de la mama embarazada inicia cambios a nivel visceral el primer trimestre en la zona s pélvica, pudiendo aparecer en su inicio síntomas de compresión, restricción movimiento articular, radiculalgias en miembros inferiores, entre otros; debido a los cambios de posición y trabajo específico del útero y sus comunicaciones ligamentarias con sacro, zona lumbar y pelvi.
Hacia el segundo trimestre, puede aparecer problemas por el cambio de biomecánica de la cintura pélvica y zona lumbar, especialmente del territorio L% por su comunicación con las láminas sacro-vesico-púbicas que están afectadas por el aumento de volumen del útero y que suelen comprimir y provocar algias mecánicas aún la raíz del nervio ciático dependiendo el recorrido en un miembro inferior o en otro según las disfunciones previas o el posicionamiento de éste.
El último trimestre se caracteriza por la exacerbación de los síntomas tales como ciatalgias, lumbalgias, lumbociaciticas y dolor en trocánter debido al peso del feto y su colocación, y además se añaden síntomas en región torácica y cintura escapular por el aumento de senos y su preparación para amamantar teniendo cuidado y previniendo posibles bloqueos de los conductos tubáricos hecho que desde nuestro centro prevenimos y damos consejos a las futuras mamas para su preparación y drenaje correcto de leche materna.
Un signo muy común en nuestros pacientes es dolor a nivel de manos acompañado de parestesias distales lo que relacionan con tuner carpiano del embarazo siendo transitorio durante este periodo.
Preparto.
La fisioterapia en la etapa preparto resultara imprescindible para una madre tanto a nivel terapéutico como informativo. El objetivo principal de la fisioterapia en esta etapa es solucionar cualquier posible complicación derivada del cambio físico producido, tales como lumbalgias o ciatalgias.
Es importante que durante esta época tanto la madre como el padre reciban un curso teórico-práctico donde se les informe de las posibles complicaciones y de cómo resolverlas además de prepararse para el momento del parto.
Una madre entrenada es más activa y participativa durante el parto, reduciendo el tiempo, el esfuerzo y facilitando la recuperación.
Postparto
Tras el embarazo el fisioterapeuta valorara el estado de la musculatura del suelo pélvico y las consecuencias del parto sobre la misma con el fin de establecer un programa de recuperación especifico que permita a la madre recuperar su optimo estado de forma y prevenir problemas tales como la incontinencia urinaria o prolapsos.
Aunque ciertas medidas posturales y recomendaciones pueden comenzar a aplicarse desde el principio, el programa de rehabilitación postparto basado en el ejercicio activo no es recomendable comenzarlo antes del cuarto.
Desde Clínica Bartolomé Puerta contamos con los mejores profesionales formados en fisioterapia obstétrica que podrán resolver y actuar de forma precisa y personalizada en cada paciente.